EROSKI CONSUMER
Apple ha acabado el verano presentando dos nuevos iPhones (además del reloj inteligente Apple Watch). Uno de ellos, el iPhone 6 Plus, es el más grande de todos los teléfonos inteligentes lanzados por Apple hasta la fecha y puede encuadrarse en la categoría de phablet, los híbridos entre smartphone y tableta.
Con 5,5 pulgadas, el iPhone Plus se puede inscribir en el apartado de los phablets. Por lo tanto, compite con otros teléfonos similares con más andadura (Xperia Z Ultra y HTC One Max) e incluso con algún otro más reciente como el Galaxy Note 4. Samsung ha acusado a Apple de imitar su modelo. ¿Cuál es el mejor phablet de todos ellos? Desde Eroski Consumer ofrecen una detallada comparación entre ellos.
Pantalla
Por lo tanto, en este apartado gana el Galaxy Note 4.
Procesador
Aunque es difícil comparar procesadores distintos, el del iPhone 6 Plus aparece como el mejor posicionado, aunque sea solo por su memoria. Sin embargo, la RAM más amplia es la del Galaxy.
Dimensiones y peso
Sin duda, el iPhone 6 Plus es el mejor dimensionado.
Cualidades ópticas
Por lo tanto, en este apartado es el Xperia Z Ultra quien expresa mejores condiciones.
Conectividad y precio
El iPhone 6 Plus añade conectividad NFC que permitirá pagar desde el móvil, una característica que también está en los demás modelos. Los cuatro presentan acceso a redes wifi, pero el diseño de Apple acepta el protocolo 802.11ac, que presenta menor probabilidad de colapso del espacio electromagnético y, por tanto, posibilita mejores conexiones. También, como el resto, ofrece cobertura 4G, pero le añade 20 bandas distintas, lo que dejará que funcione en numerosos países.
El precio del iPhone 6 Plus parte de 799 euros y puede llegar a los 999 euros en el modelo con una memoria de 128 gigabytes. Respecto al Xperia Z Ultra, el coste estimado es de 750 euros. En cuanto al Galaxy Note 4, que todavía no se ha lanzado comercialmente, se espera que tenga un importe en torno a los 700 u 800 euros. El HTC One Max es el más asequible, ya que su precio se sitúa en torno a los 630 euros libre.
AGENCIAS
Sony ha anunciado en un comunicado oficial el lanzamiento de sus propias gafas de realidad aumentada SmartEyeglass, actualmente en fase de pruebas, que saldrán al mercado en marzo de 2015. La compañía japonesa ha iniciado su batalla contra las Google Glass con el lanzamiento del SDK 'Developer Preview' que permitirá a los desarrolladores crear aplicaciones para este nuevo dispositivo.Las nuevas gafas inteligentes de Sony, que fueron presentadas en la IFA 2014, funcionan mediante la conexión inalámbrica (WiFi o Bluetooth) al dispositivo móvil que recopila los datos para proyectarlos de nuevo en las gafas. A diferencia de las gafas de Google, SmartEyeglass utiliza un cristal transparente (85%) de 3 milímetros de espesor que integra una pantalla monocromática verde para superponer la información en la vista general del usuario y garantiza un ahorro eficiente de la batería. Además, dispone de una cámara de 3 megapíxeles que permite grabar vídeo en versión VGA a una resolución de 640 x 480 píxeles.
SmartEyeglass está equipada con la tecnología punta, incluyendo un acelerómetro, giroscopio, brújula, sensor luz ambiental y un cable de conexión a una batería externa equipada con un sensor de toque extra y micrófono. Este dispositivo utiliza estas características, junto con la información de ubicación GPS conectado al 'smartphone' para proporcionar al usuario una información optimizada y adaptada a la actividad del mismo. "Los usuarios podrán ver la información de navegación mientras caminan, comprobar una receta mientras cocina sin quitar los ojos de sus manos, o ver la información relacionada con un jugador mientras ve un partido en un estadio", ha expresado la compañía.Aunque todavía no se ha desarrollado el producto final, SmartEyeglass se presenta como el nuevo dispositivo compatible con una amplia gama de 'smartphones' para la versión Android 4.1. o superior, capaz de comunicarse a través de WiFi y Bluetooth. Según las informaciones, la compañía japonesa está dispuesta a reclutar desarrolladores de dispositivos de realidad aumentada para dotar a sus nuevas gafas inteligentes de mayor funcionalidad y garantizar así su progreso hasta su lanzamiento.
AGENCIAS
Medios de todo el mundo se han hecho eco de una curiosa iniciativa que ha tenido lugar en China. En la ciudad de Chongqing han creado un carril expreso para viandantes que no levantan la cabeza del móvil mientras caminan.
Esta ciudad ha decidido poner remedio a los frecuentes choques entre los peatones que se producen cada día como consecuencia del uso abusivo del teléfono móvil. Una de las calles de esta localidad, que cuenta con más de 29 millones de habitantes, se ha llenado de carriles destinados al uso exclusivo de teléfonos móviles para aquellas personas que pasean sin despegar su mirada del móvil, mientras que el resto de transeúntes se dedica a esquivar a estos zombis adictos a las tecnologías.
El carril ha sido diseñado con gruesas líneas blancas en las que aparecen unas flechas que indican el sentido de la vía. Para que no quepa ninguna duda, el carril de los adictos al teléfono móvil está señalizado con un dibujo de un 'smartphone' acompañado de texto en chino e inglés, y el otro, con un 'smartphone' con la señal de prohibido.
Además de estas señas dibujadas en las calles, las autoridades se han preocupado por reconocer su iniciativa con carteles en los que se leen "Primeras aceras de teléfonos móviles en China" y un diagrama que muestra cómo utilizar el carril. Lejos de parecer una idea absurda, las autoridades de esta localidad han querido cubrir sus espaldas con la creación de esta nueva medida que pretende evitar futuros atropellos y accidentes ocasionados por el mal uso de las tecnologías.
La iniciativa recuerda al experimento llevado a cabo por National Geographic este mes de julio en calles de Washington DC.
Chongqing City has set up China's 1st "exclusive sidewalk for mobile phone users to avoid possible crashes on Fri pic.twitter.com/jFiCbbE1yk
People's Daily,China (@PDChina) septiembre 13, 2014La idea nace de una empresa local, Meixin, quien vio la oportunidad de hacer negocio cuando el canal estadounidense National Geographic "pintó" vías similares en la ciudad de Washington este verano a modo de experimento sociológico.
700 millones de usuariosLa firma no dudó en dar un paso más e implementar la iniciativa de forma permanente en China, donde 700 millones de sus más de 1.300 millones de habitantes ya cuentan con un teléfono móvil y las tasas de consumo de Internet en estos aparatos son de las más elevadas (158 minutos por día, mientras la media mundial se sitúa en 117, según un estudio de 2013 publicado por un medio oficial chino).
"Hoy en día, con el desarrollo de los teléfonos inteligentes, es muy común que la gente aquí juegue al móvil cuando camina, así que imitamos a National Geographic y decidimos ofrecer esta vía especial en nuestra ciudad", explicó esta semana a los medios de comunicación Lu Xiaoqing, un representante de Meixin, la firma creadora.
El paseo mide unos 50 metros y se ubica en un puente que cruza una de las zonas más turísticas de esta urbe, por la que caminan más de 5 millones de habitantes.Como predijeron sus diseñadores, la polémica no tardó en llegar, y sin cumplirse una semana desde su estreno, ya se han multiplicado las críticas por su "poca utilidad", su "irresponsabilidad por alentar a una mayor adicción de la actual" o hasta su ubicación.
"Se encuentra al lado de una carretera, si la gente no tiene cuidado y encima se le alienta a que no miren por dónde van, puede convertirse en un punto negro", opinó una ciudadana de Chongqing en la red social Weibo, el Twitter chino. Junto a ella, otros expertos locales y periodistas también exponían sus dudas sobre los riesgos. "China es un país con un gran número de adictos a videojuegos, y ¿ahora les incentivamos a seguir jugando mientras caminan?", señalaba un analista en la televisión de Chongqing.
"El paseo de móvil tiene más sentido simbólico que real", sentenciaba Ren Qiliang, un catedrático que denostaba la seriedad de los análisis sobre la nueva vía y descubría el secreto del controvertido proyecto: "Se trata de diversión, y de publicidad. De turistas. Los que va a ganar Chongqing con todos vuestros comentarios en internet".
No es lo que creía